Le faltó claridad durante casi toda la tarde y no logró aprovechar la experiencia de la mayorías de sus jugadores.
Desde que el árbitro Alfredo Espíndola dio el «pitazo» inicial sólo pasaron 40 segundos para que los dirigidos por Nicolás Canelo se encuentren con la apertura del marcador. La jugada se inició a través de un juego de pases cortos entre Kevin Guevara, Agustín Maddío y Joaquín Rodríguez, quien desbordó por la izquierda y tiró un centro atrás, por abajo, para la llegada de Franco Vignale que le pegó fuerte y su remate salió esquinado al primer palo del arco que defendía el ex Piazza, Rodrigo Vivas. Fue un gol muy festejado ante un rival que luego lamentaría ese descuido.
Con la ventaja a su favor, el conjunto albinegro seguía apostando al ataque por intermedio de Kevin Guevara, quien tuvo duelos aparte con los defensores del «Chaira», Maximiliano Chevrot y Alan Pérez, ya que apelaban constantemente a las infracciones para detenerlo.
Alumni encontraba respuestas a partir del juego de Vignale y Maddio. Mientras que los olavarrienses, que seguían desatentos en la marca, también perdían en la zona de los volantes. Precisamente, este último jugador tiro centro a la «olla», donde Guevara no estuvo cómodo para patear y prefirió asistir a Gonzalo Castro, quien remató con alma y vida, pero la pelota se fue desviada ante la mirada de Vivas.
Racing, uno de los equipos más ganadores en la liga olavarrienses, además de contar con dos ascensos a la tercera categoría del fútbol argentino, que en su momento se llamó Torneo Argentino A, le faltó claridad durante casi toda la tarde y no logró aprovechar la experiencia de la mayorías de sus jugadores con varios partidos encima en los certámenes regionales.
Asimismo, sobre el final de la primera parte, Racing tuvo dos situaciones de gol frente el uno del conjunto local. La primera nació por una asistencia de Santiago Izaguirre hacía Pablo Mujica, quien en su apuro por definir, le pegó «mordida» y la pelota quedó en las manos de Michat. Mientras que la siguiente se produjo por un error de Luciano Selaya, tras cabecear el balón para dársela a su defensa, terminó en los pies de Yoel Juárez, quien le ganó en la carrera al «Zurdo» Rodríguez porque éste se patinó, es por eso que llegó en soledad al área grande y ante la presencia del «uno», su remate se fue apenas desviado por el palo derecho del arco local.
Después, con fútbol deslucido, ambos equipos empezaron a realizar cambios, siendo la visita que utilizó a casi todos los jugadores que estaban en el banco de suplentes. Sin embargo, los recién ingresados no mejoraron el funcionamiento de Racing que no alcanzó para equilibrar la mejor tarea de su rival. En ese sentido, vale destacar que entre Mateo Yozzi, Selaya, Castro y Maddio lograron neutralizar a Izaguirre y a Matías Ordozgoiti, dos generadores de juego del conjunto «Chaira». Éste último no tuvo el olfato de otra veces (sea para asistir o marcar un gol) y se mostró irresoluto.
La incapacidad creativa de los «Chairas» facilitó el trabajo del conjunto local y al equivocarse en las entregas, la pelota estuvo mucho tiempo en los pies de los volantes de la «Ponzoña», quienes la administraron correctamente, aunque, junto con los delanteros, no lograron crear situaciones claras de gol durante toda la segunda parte.
Sin goles de Racing, Alumni aguantó el tiempo restante hasta que el hombre de negro dijo basta con un largo «pitazo» que hizo saltar de alegría a todos los jugadores del conjunto albinegro. El actual «Bicampeón» de la liga azulea confirmó en esta serie el muy buen nivel en conjunto que viene exponiendo en ambos torneos.
En tanto que el elenco olavarriense se despidió de la competencia y ahora apuntará sus cañones al certamen oficial y al Torneo Regional Amateur.
Fuente: Texto extraído de la página web del Diario «El Tiempo»